domingo, 5 de junio de 2011

Propuesta para una DRY en las próximas elecciones

Las convocatorias, acampadas, y en general, la indignación, siguen su curso; sin embargo no deberíamos olvidarnos de las próximas elecciones nacionales, un evento para el que podemos ir preparandonos ante su posible adelanto.
Hemos aglutinado diversas ideas para generar una nueva propuesta; para que tenga éxito debe basarse en algunos principios:
- Sencillez: No debe ser necesaria una organización 'profesional' para darle forma, aunque será imprescindible la colaboración de profesionales y expertos para coordinar la iniciativa y darle difusión.
- Factible: Se fijaran unos objetivos posibles en el tiempo (una legislatura), y siempre dentro del marco legal existente.
- Amplio consenso: Es quizá lo más complicado; unificar criterios y luego priorizar; eso no significa que se renuncie a nada, si no que las propuestas se irán presentando en un orden lógico; para aglutinar el mayor número de apoyos y conseguir el objetivo, sería de utilidad escuchar los informes del Centro de Investigaciones Sociológicas sobre los asuntos que más preocupan a los españoles.

Esta propuesta necesitaría únicamente de dos etapas diferenciadas:
1.- Una primera fase de debate (en proceso), y que debería culminar con la redacción de una resolución de amplio consenso, en la que 'todos' se sintieran representados; lógicamente eso hará que muchos temas queden pendientes sin que se renuncie a ellos; existen una serie de objetivos ya a nuestro alcance y a los que nadie se opondrá (al menos públicamente), lucha contra la corrupción, aumento de la participación social en la política y un sistema electoral más justo, que además son irrenunciables.
- Las acampadas han sido una herramienta en esta fase.
- A partir de ahora, las concentraciones periódicas, las asambleas de barrio, etc, son primordiales para mostrar a la sociedad que se mantiene una posición fuerte.
- Otra herramienta será internet; una vez conseguidos esos mínimos de gran consenso, será necesario distribuir e informar.
- Es posible que en esta fase se pueda contar con el apoyo de la prensa independiente.

2.- Una segunda fase en la que las formaciones políticas existentes deberían decidir (internamente) si suscriben ese consenso de mínimos; lo harían mediante un documento público ante notario; con este documento recibirían una 'certificación' de limpieza democrática, (o Certificado DRY); los partidos que no consiguieran el visto bueno, no recibirian ni un solo voto de un indignado, y posiblemente, si el mensaje es lo bastante claro, perderían muchos otros.
- El voto sería libre entre los distintos partidos con certificado DRY; fuera de este consenso, cada uno mantendría su programa.
- Ese gran consenso no se negociaría individualmente.
- Se permitiría la agrupación de partidos políticos esta primera vez, para salvar la injusta no proporcionalidad.
- Notario; se podría añadir a esos mínimos una clausula de compromiso sobre la iniciativa y/o apoyo a las iniciativas legislativas...

Creo que empezar a organizar algo así sería positivo para la vida política española, con un eslogan tal que así: SEGUIMOS INDIGNADOS, Y NO NOS VAMOS A OLVIDAR; PRÓXIMO CAPITULO EN LAS URNAS DE TODA ESPAÑA.

1 comentario:

  1. Hasta la segunda fase todo perfecto, pero hay que ser realistas y sabemos que los partidos no van a firmar nada ante notario y no se puede cortar el voto de nadie porque entre los principios del movimiento 15M esta la libertad ideológica.

    Sí se puede ofrecer las propuestas afirmadas en la primera parte a los partidos y si las secundan que el movimiento se encargue de vigilar y denunciar cualquier ruptura del compromiso.

    ResponderEliminar